Tenemos que aprender como sea. En dos sesiones nos hemos ventilado la película "el nombre de la rosa", sobre la novela de Umberto Ecco, centrándonos en la importancia y el poder del saber, custodiado en los libros.
Hemos recordado la anécdota de cómo la ciudad de Alejandría, famosa por su biblioteca -a través de Hipatia en la película "Agora"-, requisaba los libros de los visitantes para copiarlos y dotarse de un ejemplar idéntico, poseyendo el saber que contenían. Del mismo modo, en los monasterios, abadías, se continuaba la misma táctica de conservación, de ahí copistas amanuenses, iluminístas, traductores,... en los conventos.
Sobre un fondo de luchas de clases, (dulcinistas), así como las mismas Ordenes y Congregaciones de la Iglesia, se pretende controlar y templar esta conflictividad latente. Cuestionar el orden establecido, aunque fuese a través de la ironía, la crítica, siempre generaba "constructos hipotéticos" argumentativos de la situación parcial que se demandaba y combatía hasta el aniquilamiento. Y para defender la pureza de la doctrina, no tanto de las costumbres, se inicia el proceso de la creación de la Santa Inquisición o el Santo Oficio. Todas fórmulas que pudieran minar y socavar la autoridad establecida, eran celosamente combatidas con métodos despiadados. Toda la acción gira entorno al 2º libro de Poética de Aristóteles, un libro que se mofa de los "superiores" y por este motivo ha sido envenenado para que aquel que lo lea no viva para contarlo. Dejándose claro que NO SE PUEDE CUESTIONAR LAS VERDADES ESTABLECIDAS POR LOS ANTIGUOS. ASÍ COMO DEJA CLARO QUE EL DEBER DE LA IGLESIA ES LA PRESERVACIÓN DEL CONOCIMIENTO FRENTE A LA INVESTIGACIÓN. Curiosamente la investigación será proscrita, y perseguida su práctica.
El monje-maestro, junto a su novicio (novato) intentan desarrollar un aprendizaje observacional, leyendo con mucho detalle los hechos así como los libros. Razonando los por qué de cada acontecimiento y sobretodo explicándose cada circunstancia, ¿cómo vivían, sus costumbres, ... ? y como muchas de estas aún las mantenemos nosotros en estos días. Pero la película filtra más información. El monasterio ocupa un espacio, situado en el alto de un montaña controla un paso/puerto de montaña, es refugio y es puesto de vigilancia de la comarca y de "peaje". La propia abadía, se configura como una fortaleza, y ejerce un dominio sobre la zona de vasallaje a la que le reclama el cobro del diezmo. El recinto es una unidad económica funcional, debe resolver las necesidades básicas de los miembros, además de la biblioteca, el refectorio, las celdas, el coro de la iglesia,... Dispone de la oficina de la botica, donde se dispone de un mobiliario provisto de tarros que contienen distintas y abundantes remedios de la naturaleza, al par que instrumental de la alquimia con los que destilar "simples" o principios. El hospital, y sus modos de inhalar vapores, o através de baños terapéuticos. En fin la película es un "mirador" del tiempo.
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